Los pequeños de 12 meses (y algunos incluso antes) ya intentan ponerse en pie. ¿Va todo muy rápido, verdad? Se cogen a las cosas que encuentran armarios, mesitas... un dolor de cabeza si tienes que ir detrás de él constantemente con miedo de que se haga daño.
No te apures, te traemos ayuda para que pueda aprender a andar sin que tengas que estar todo el día asustada/o cogiéndolo por la casa.
Los corepasillos y los andadores ofrecen tanto apoyo como motivación a los peques para que disfruten de la experiencia y enseguida lo tengan dominado.
Andador: Los andadores son muy interesantes, ya que muchos tienen botones y luces que les genera la suficiente curiosidad para tocarlos, mirarlos y agarrarlos, haciendo que finalmente se apoyen por si solos en él y se den cuenta de lo fácil que es andar por la casa empujándolo, desarrollando así el movimiento de las piernas y el equilibrio.
Correpasillos: Algunos bebes necesitan tener más confianza para empezar a andar, al estar sentados aprenderán a dominar el movimiento de las piernas para luego tener luego más seguridad e ir como un rayo por toda la casa.
Uses el correpasillos/andador que uses, anímale cada vez que veas que lo hace bien, ¡para él es toda una aventura nueva y complicada!
Algún día dejarán de lado el correpasillos o el andador, pero por ahora, estos les ayudan a trabajar la motricidad gruesa, a desarrollar fuerza en las piernas y, lo mejor de todo para ellos, a disfrutar de un poco de libertad (aun que les tengas puesto el ojo encima todo el rato, ellos se sentirán libres)
Con el tiempo podrá usar un correpasillos para exterior, alargando así los paseos o yendo a parques que se sitúan más legos de casa.
Ten paciencia, en cuando te des cuenta será mayor y no podrás disfrutar tanto tiempo de ella/él como ahora.
¡Aprovéchalo y disfrútalo!
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